El partido entre Espanyol y UD Las Palmas se caracterizó por la abundancia de faltas, señaladas con precisión cirujana por el colegiado Melero López. El partido contó con ello con multitud de interrupciones. Sin embargo el árbitro andaluz no quiso saber nada de un penalti reclamado por los amarillos en la segunda parte. Araujo llegó antes que el portero Pau López, quien en el salto fuera del área de meta atropella al delantero argentino. Las protestas de los grancanarios cayeron al vacío. Una jugada polémica en medio de tantas decisiones.
Utilizamos cookies y tecnologías similares propias y de terceros, de sesión o persistentes, para hacer funcionar de manera segura nuestra página web y personalizar su contenido. Igualmente, utilizamos cookies para medir y obtener datos de la navegación que realizas y para ajustar la publicidad a tus gustos y preferencias. Puedes configurar y aceptar el uso de cookies a continuación. Asimismo, puedes modificar tus opciones de consentimiento en cualquier momento visitando nuestra Política de Cookies y obtener más información haciendo clic en: Política de Privacidad