La UD, víctima del juego interruptus
19/01/2016

El equipo de Setién es el segundo que más faltas recibe de la Primera División, con un promedio de 18.2 por partido. El técnico reitera sus quejas porque muchas faltas tácticas impiden la continuidad en las acciones de ataque

M.B.

Las quejas reiteradas de Quique Setién por la abundancia de faltas y sus consecuencias en el juego interruptus que acusa la UD Las Palmas están bien argumentadas. El técnico llegó a decir el pasado fin de semana, tras el partido contra el Atlético de Madrid, que Bikandi Garrido "no nos ha medido por el mismo rasero" -la más contundente observación que se puede mencionar sobre un juez deportivo- y que no comprendía cómo un equipo con 21 faltas había sido levemente sancionado con el reglamento en mano.

Sus palabras no las dejamos caer en el vacío. Y al comprobar el ranking de faltas, replicados por distintos medios nacionales, hay unanimidad en colocar a la UD Las Palmas como el segundo equipo que más infracciones reciben sus jugadores. El dato: la UD ha sido frenada con una acción antirreglamentaria en 324 oportunidades por los equipos rivales en los 20 partidos de Liga disputados. El jugador que más faltas recibe de los amarillos es Jonathan Viera (48) y el promedio de faltas recibidas es de 16.2 por encuentro.

Se da la circunstancia de que su próximo rival de Copa, el Valencia, es el que primero está en este curioso ranking: 377 infracciones rivales, con un promedio de 17.9 faltas por partido. Tras valencianos y grancanarios siguen Real Sociedad (301), Celta (295), Barça (293), Sevilla (290), Levante (287), Betis (285), Espanyol y Granada (280), Athletic (275), Málaga (274), Real Madrid (270), Rayo Vallecano (263), Villarreal (259), Getafe (245), Atlético de Madrid (234), Sporting de Gijón (225), Deportivo (222) y el Eibar (206). El promedio del equipo armero desciende hasta 10.8 por partido.

Y es que, para más incidencia, Las Palmas está en la cola de la clasificación de los conjuntos que cometen faltas; en 16º puesto con un total de 250 infracciones (12.5 de promedio). Este apartado está liderado por el Espanyol (367), que precisamente demostró en Cornellá ante el conjunto de Setién esta condición, aunque en aquella oportunidad superó con creces su media general: de 18.3 por partido pasó a 29 para frenar el juego de los grancanarios.

A los periquitos le sigue el Valencia (323), Eibar (309), Levante y Granada (303), Málaga (298), Villarreal (296), Sevilla (284), Rayo Vallecano (283), Getafe (277), Celta (276), Atlético de Madrid (273), Sporting de Gijón (270), Athletic (258), Betis (256), Las Palmas (250), Real Sociedad (240), Deportivo (233), Real Madrid (207) y Barcelona (179).

Con estos datos en la mano, es normal que Setién y sus jugadores reclamen más rigor a la hora de aplicar el reglamento cuya función es servir de escudos a los equipos que son leales con el espíritu del juego. Los números siguen desnudando la realidad.

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