M.B.

Fue el director de UDRadio, Ruymán Almeida, quien en el transcurso de la retransmisión del partido ante el Getafe  ha bautizado a la nueva sociedad que trae de cabeza a los técnicos de equipos rivales de la UD Las Palmas. Los tres pequeños que se relacionan en el centro del campo están liando a los adversarios, envolviendo también en su propia magia al fútbol de la UD Las Palmas en este tramo de la competición tan determinante.

Roque en el primer escalón de las operaciones; Tana y Viera en los dos siguientes, más próximos al área. Ya fue notable que el trío de peloteros grancanarios, tres momentos casi coincidentes de la cantera, fueran los que dictaran hace apenas unos días la victoria en Ipurúa. No sólo ganaron a los jugadores del Eibar en fútbol con balón, sino en la batalla sin él. Hasta el punto que Mendilíbar, que había regado el campo antes de que cayera el diluvio característico de la Cornisa Cantábrica, llegó a decir tras el 0-1 que el agua les había perjudicado. Se hizo un lío el técnico armero para no reconocer que los pequeños de la UD le habían hecho un agujero a su equipo.

Este martes, otro registro. Los tres socios amarillos se distribuyeron por el campo pero con intenciones perversas para el Getafe. Participaron en robos, recuperaciones y coberturas, mientras tuvieron más tarde energía para salir con jugadas de contragolpe bien trenzadas y que, a medida que avanzaban los minutos, iban teniendo mejor finalización. El Getafe adelantó metros para presionar la salida de balón de los amarillos, especialmente en el caso de Roque, y se metió en un laberinto del que sacó tajada el equipo amarillo.

La labor del trío quebró no pocas maniobras de los jugadores de Fran Escribá. Y además encontraron una gran ayuda en la solidaridad defensiva de sus compañeros. Porque si fue valioso hacer cuatro goles a Guaita, no menos dejar la portería de Javi Varas a cero. Es la segunda vez que ocurre de manera consecutiva también. Porque Las Palmas, con ellos, Momo, El Zhar e incluso Willian José, jugó en Eibar y ahora ante el Getafe muchos minutos mejor sin que con balón. Hemos de subrayar la labor encomiable de Momo Figueroa, quizá firmando sus mejores minutos no sólo de esta temporada sino desde su regreso al equipo: Por la calidad en todas las facetas del juego y por el nivel de Primera División adverso.

En partidos como el de este martes es difícil encontrar fisuras en una labor que fue tan sólida en lo colectivo como descatada, en las distintas facetas del juego, en cada uno de los integrantes que firmaron la goleada.

Esta UD da sensaciones de enderezar la vela en un momento evidente de tránsito de generaciones, con tres pequeños que ahora toman la batuta y marcan el nuevo son de un equipo plagado de contratiempos. Con este ritmo, sacrificio y compromiso ... la tierra firme no está tan lejos.