B.P.

La vida de David García es casi una plena reivindicación, desde su debut en la UD Las Palmas desde 2003-04. Este sábado marcó su primer gol en Primera División, tan valioso a nivel personal como para el equipo. El capitán está viviendo un sueño. "¿Qué más puede pedir?" se preguntaba al finalizar el partido en el que había logrado ser determinante.

A David le ha costado entrar en los planes del equipo en la Primera División. Lo ha hecho de forma simultánea a su reciente paso por la frontera de los 400 partidos oficiales como jugador de amarillo, desde su debut el 17 de septiembre de 2003 con Juan Manuel Rodríguez.

"Todo está saliendo perfecto. Hemos sufrido mucho para ganar el encuentro. Pero ahora estamos en esa racha, dejando la portería a cero que es una de nuestras claves", comentó feliz.

"Sabíamos que de cualquier forma íbamos a sufrir ante un rival como el Villarreal", admitió García. "Pero luego, en la segunda parte, nos hemos organizado muy bien en la retaguardia".

El capitán, con tanto oficio, tranquiliza: "Es un paso importante, pero no definitivo. No tenemos motivos para bajar los brazos". El próximo fin de semana le tocará el turno de saludar al capitán del Real Madrid, en los prolegómenos del encuentro. La vida también para él es absolutamente rosada.