B.P.

Aíto viajó con sus hombres a Polonia con desconfianza. Advirtió antes de la partida que "no cambiaremos el sentir de la gente, pero sí lo hablaremos internamente. Tengo un ejemplo muy claro, cuando era entrenador del FC Barcelona, los equipos potentes de Europa eran Milán, Roma, Bolonia y cuando jugábamos contra equipos yugoslavos que nunca habían sido campeones, decían que eran malos o fáciles. Esa situación era mucho más difícil de superar que cuando venía un equipo italiano que todo el mundo respetaba".

Porque, para el entrenador, "sabemos que es permeable esa opinión exterior, por ejemplo, la gente respeta mucho más al Unics Kazan que al Stelmet Zielona Gora, pero hemos visto los partidos entre ellos y es mucho mejor el equipo polaco, y por eso les han eliminado. Sin embargo, la gente se queda con el nombre. Hay que respetar lo que piensa la gente, pero nosotros debemos desmarcarnos por completo de esa situación".

Aíto ha repasado bien los vídeos de la eliminatoria frente al Kazán, donde ha comprobado que Zielona Gora "tiene un estilo de equipo trabajador; es agresivo en ataque y en defensa. Juegan un buen baloncesto".

Rabaseda escuchó

El mensaje lo replica Xabi Rabaseda, al advertir que Zielona "es un equipo que juega muy agresivo, fue capaz de ganar de 17 puntos en Kazán y demuestra el potencial que tienen. Vienen de jugar Euroliga en la primera fase y seguro que es un buen equipo. Estamos en una buena racha, estamos jugando bien pero nadie nos va a regalar nada. Es un partido importante para tener una buena ventaja como contra Limoges".

Recordó que la oponión general "también era favorito Unics Kazan o Laboral Kutxa este fin de semana y perdió. Todo el mundo juega para ganar y nadie nos va a regalar nada. No vamos a ganar el partido sin jugarlo, hay que trabajar muy duro y no va a ser fácil".

"Si cogemos una buena diferencia de puntos como en Limoges seguro que será más fácil jugar en casa con esa renta que no jugar un partido igualado donde ellos están más cómodos. En casa les cuesta más pero han demostrado que fuera de casa juegan sin presión y son capaces de ganar a equipos mejores que ellos", otra advertencia.

"El Gran Canaria tiene muchas ganas de ganar, de llegar lo más lejos posible pero sabemos lo difícil que es y nadie nos regala nada. Los equipos están avisados, tienen la referencia de que el año pasado el equipo llegó a la final y eso les hace poner más orgullo y concentración porque tienen la ambición de ganar a este equipo. Tenemos que ponernos las pilas y plantear un partido duro en Polonia para volver con un buen resultado", concluyó.

El encuentro se disputa este miércoles a las 18.15 hora canaria.