La imagen corresponde al partido que disputó, bajo intensa lluvia y agua nieve, la UD Las Palmas en el Estadio Santiago Bernabéu. Los  que celebran el gol del definitivo empate (1-1) son Morete y Crispín Maciel. Dos delanteras que se complementan perfectamente. El ariete argentino era el hombre de la velocidad y del fútbol a ras de suelo; el paraguayo dominaba el aire, con desvíos y peligrosos testarazos de cabeza. Muchas alegrías juntos en los años setenta y 129 goles oficiales para el club grancanario: 99 y 30 respectivamente. Foto magnífica de una etapa sensacional del equipo.