M.B.

El campeonato de grupo logrado este pasado fin de semana por la UD Villa de Santa Brígida tiene muchos nombres propios. El de Alex Suárez (Las Palmas de Gran Canaria, 18 de marzo de 1993) debería estar situado en las primeras posiciones de esa parrilla. El polivalente defensa que llegó hace temporada y media procedente del Acodetti es una de las sensaciones del equipo y de toda la Tercera División. Fuerte, poderoso, rápido, intuitivo y con buen trato de balón ... todo ello en una etapa de crecimiento que le ha permitido actuar en diversas posiciones de retaguardia y centro del campo, incluso, con Israel Quintana.

Alex es uno de los triunfadores individuales en la fase regular del grupo de Canarias de Tercera. Se formó en UD Las Palmas desde alevín hasta División de Honor de juveniles. Siguió su trayectoria con los naranja del Acodetti cuando salió de filiales y, desde entonces y hasta ahora, en el Villa ha logrado su confirmación deportiva. Si hubiera que confeccionar un once del campeonato canario, su nombre estaría en boca de muchos entendidos.

"Sí, estoy muy satisfecho con la campaña del equipo y la personal. Creo que todo ello pasa por la confianza que he adquirido en mi juego en este segundo año en Tercera, la que me ha brindado el entrenador. He actuado en el lateral derecho, en el centro de la defensa y por el interior. Tengo motivos para estar muy contento con lo realizado hasta ahora", apunta.

El gol que remató un campeonato

Y, además, ha contribuido con goles importantes para las aspiraciones del club satauteño. Uno de ellos le valió para celebrar este domingo la confirmación del simbólico título regional. "Llevo cinco tantos, algo que no es normal en mí. Pero entiendo que todo está relacionado con mi momento de juego", nos apunta.

Alex Suárez sueña con ser profesional del fútbol. El camino que ha conocido esta temporada le puede llevar a ese destino. Sus prioridades están en Santa Brígida. "Pues tenemos una grandísima ilusión para el play off. Queremos ascender. Es un reto para toda la plantilla. Todavía no hablamos mucho de los rivales posibles, porque falta una jornada y hay plazas abiertas. Pero ya tenemos ganas de conocer el desenlace del sorteo".

El zaguero indica que "nos apetece jugar el segundo encuentro de la promoción de campeones en casa. Sería muy bonito. Ese premio no depende de nosotros. El ambiente que hay en el equipo de cara al play off es extraordinario. Estamos muy unidos y muy motivados, como una familia. Todo lo que nos ha pasado durante el año nos ha hecho más fuertes". Y de eso se encarga, en esa familia del Villa, los padres internos del equipo que "son Jonay Carreño, Arocha, Pablo Alvarez y David Figueroa. Vamos; los capitanes".

Mejora Los Olivos

Uno de esos hechos fue la eliminación con el Móstoles de forma cruel en la Copa Federación. Aquello ocurrió en el Juan Guedes, un campo alternativo porque las condiciones de Los Olivos no eran las idóneas. Pero ahora, tras las reformas recientes realizadas en la superficie, todo ha cambiado. "Creo que para nuestro fútbol ahora el campo de Los Olivos está mejor. Antes, cuando los equipos venían a encerrarse, nos costaba mucho crear una ocasión. La superficie era muy lenta y mover la defensa rival era ya de por sí un trabajo duro. Sin embargo, desde hace tres semanas la cosa ha mejorado mucho. El campo nos puede ayudar para sacar nuestro mejor juego".

Y eso consiste en "ser fuertes en defensas y mantener el juego de pases, combinaciones, que tenemos en la plantilla".

Suárez no quiere despistarse cuando está a punto de llegar la hora de la verdad. "Lo que tenemos que hacer de aquí al final del play off es mantener este ambiente y esta moral. Ser constantes ha hecho que seamos los justos campeones del torneo en Canarias. Hemos luchado con él y siempre el equipo ha tenido ambición de mejorar. En la promoción nos espera lo mejor de la temporada, lo que todos deseábamos vivir. Nos entregaremos. Luego, cuando todo acabe, pensaremos en lo que viene y sabremos en el lugar donde estamos".