Las camisetas de los equipos modestos del fútbol español se han convertido en un campo de la batalla entre la Real Federación Española de Fútbol y ProLiga. Hace unos días, la RFEF comunica a los clubes de Segunda B y Tercera División la obligación de lucir a partir de esta próxima temporada el parche con el icono federativo en el brazo derecho, exponiendo color y dimensiones y la ausencia de publicidad.
ProLiga, en respuesta, a esta propuesta 'invasiva' también ha hecho una recomendación a sus asociados (entre los que se encuentra la práctica totalidad de los equipos del grupo canario de Tercera). Y es colocar el parche propio bien en el brazo izquierdo o en el pecho hacia el sector derecho. Incluso muestra (imagen) los modelos para su ubicación en los uniformes oficiales de los equipos.
La lucha entre los organismos promete ser dura. Detrás de todo ello los derechos de los clubes más humildes, olvidados durante muchos años y ahora en el epicentro del debate.