B.P.

Tal día como este 4 de diciembre, hace 50 años, el Comité de Competición de la Federación resolvía de forma salomónica un incidente peculiar en el Estadio Insular, durante el encuentro entre la UD Las Palmas y el Elche (1-1). Fue un partido bronco que acabó con dos expulsados: Paco Castellano (cuatro partidos de sanción) y Genaro García (catorce encuentros).

El Elche llegaba al recinto de Ciudad Jardín dispuesto a parar a una UD que estaba inmersa en las campañas del subcampeonato y tercer puesto de la Primera División.

El colegiado madrileño Alvarez Martínez cortó con las expulsiones de los dos jugadores el momento cumbre del partido. Instantes antes, Juan Guedes había recibido una durísima entrada del propio García, que le abrió una brecha en la rodilla. "Y cuando Paco se dio cuenta de lo que había pasado, se fue hacia el jugador para recriminar la acción. En ese momento se llevó una trompada" recuerda con ágil frescura mental José Manuel León, ‘historiador' in situ de aquel extraordinario grupo de jugadores que dirigió Luis Molowny.

De aquel incidente quedaron otras secuelas, además de mantenerse hasta el final un partido muy duro, algo por encima de los de la época. Guedes, con su ejemplar pundonor, aguantó en el campo casi hasta el final. Pero no pudo acudir días después a la llamada de la selección española, cuando el seleccionador Toba había convocado también a Tonono, Germán, Martín Marrero y Justo Gilberto de entre el notable equipo amarillo.

Castellano sufrió en sus carnes el duro golpe rival y, además, la sanción federativa. "En Las Palmas pasan cosas muy raras" dijo el presidente del Elche días después José Esquitino Sempere, que con habilidad administrativa logró reducir a seis partidos el castigo de su jugador.

Por cierto, los goles del encuentro fueron obras de Asensi (años después jugador del FC Barcelona) y Niz, este último para Las Palmas.