Manuel Borrego
El pasado 18 de marzo de 2019, la directiva de la Federación Regional de Lucha Canaria emitió un comunicado a los cuatro vientos pidiendo públicamente "la dimisión del Comité Canario de Disciplina Deportiva y la depuración de responsabilidades de sus miembros" como consecuencia del desarrollo y desenlace del denominado Caso Medianito.
Esta solicitud, firmada por el presidente Juan Ramón Marcelino, fue trasladada a la Dirección General de Deportes del Gobierno de Canarias para que tomara una decisión al respecto por lo que entendían una vulneración de las normas "que exige que cumplan a los organismos deportivos y deportistas sobre los que ejercita sus competencias".
Este lunes 29 de abril, más de un mes después de aquella solicitud, Tinta Amarilla tuvo la oportunidad de cuestionar sobre el asunto al Director General de deportes, José Francisco Pérez, en un acto relacionado con la entrega de premios del Gobierno de Canarias. "Ese tema para mí está zanjado, cerrado", expresó.
Confirmó Pérez que a consecuencia de esa petición de los federativos propició un encuentro entre los miembros del Comité Canario y de la Federación Regional de lucha. "Entre ellos debían resolver las diferencias de interpretación o las divergencias que podrían haber. Así se hizo y entre ellos hablaron" (...) "Pero yo no puedo cesar al Comité Canario ni interferir en las resoluciones. Eso está claro".
José Francisco Pérez desconocía que la Federación Regional de lucha canaria hubiera hecho o no un segundo comunicado para aclarar lo acontecido en esa reunión o dar marcha atrás, si procedía, en su petición de dimisión del colectivo de jueces deportivos.
De igual forma, nos explicó que el asunto del denominado Mundial de lucha canaria -origen de las discrepancias con la sanción a Medianito IV y tres bregadores más- tuvo "un apoyo puntual por parte de la Dirección General de Deportes. Me lo pidieron en aquel momento y así lo hicimos. Si tras las elecciones volvemos a gobernar, ya retomaremos el asunto" relacionado a su organización.
En suma, la petición de dimisión del Comité Canario de Disciplina Deportiva fue un titular de prensa impactante. Pero la realidad es que, tras él, hubo nada.
