Según comunica en nota oficial la Federación de Fútbol de Las Palmas, su Comité de Competición y Disciplina Deportiva ha sancionado con ocho meses de inhabilitación al presidente de un club de fútbol de Fuerteventura en relación con los incidentes registrados en el partido disputado el pasado 1 de noviembre entre el UD Jandía y CD Breñamen de la competición de Copa de Primera Regional.
De acuerdo con el texto remitido, en la misma resolución del órgano disciplinario de la FIFLP se establece que el equipo del UD Jandía, al que representa el presidente sancionado, se vea en la obligación de celebrar los próximos cuatro partidos a puerta cerrada cuando lo haga en su condición de local. El Comité de Competición ha decidido dar por finalizado el encuentro, suspendido en el minuto 83, con el resultado de UD Jandía (1)-CD Breñamen (3).
En la misma resolución también se sanciona a dos jugadores (cuatro y dos meses de suspensión), al delegado de campo (dos meses) y al entrenador del club local (dos meses).
En relación con la sanción al presidente del UD Jandía, y como se detalla en la amplia resolución del Comité de Competición, el máximo responsable de la entidad futbolística se situó en el banquillo de su equipo y desobedeció la indicación del árbitro que le requería que saliera del terreno de juego.
Además, el presidente se encaró al árbitro hasta el punto de tener que ser sujetado y separado por jugadores de ambos equipos a fin de que llegara a la persona del árbitro. El colofón a su comportamiento se produjo cuando tuvo que ser retirado por los agentes de policía que acudieron al lugar tras ser avisados que se estaban produciendo graves incidentes.
Entiende el comité disciplinario de la FIFLP que los hechos protagonizados por el presidente del UD Jandía deben calificarse como "intimidación al personal arbitral", una infracción muy grave recogida en el artículo 86. 1. h) de la Ley 1/2019, de 30 de enero, de la Actividad Física y el Deporte de Canarias y el artículo 83.2 del RRDFCF.
Xenofibia
Un futbolista juvenil del conjunto Achamán ha sido sancionado con ocho meses de suspensión después de que el Comité de Competición y Disciplina Deportiva lo considere autor responsable de una infracción muy grave del artículo 46.3, apartado C, del Reglamento Disciplinario de la Federación Canaria de Fútbol.
En el mencionado texto disciplinario se hace referencia expresa a las "declaraciones, gestos e insultos que fueran proferidos en las instalaciones deportivas o en sus inmediaciones que supongan un trato manifiestamente vejatorio para cualquier persona por razón de su origen racial, étnico, geográfico o social, así como por la religión, convicciones, capacidad, sexo u orientación sexual".
Además, el órgano disciplinario de la FIFLP ha decidido remitir copia de las actuaciones a la Fiscalía Provincial de Las Palmas de Gran Canaria ante la eventual comisión de un presunto delito tipificado en el artículo 510 del Código Penal en el que se hace referencia a "los delitos cometidos con ocasión del ejercicio de los derechos fundamentales y de las libertades públicas garantizadas por la Constitución" para los extranjeros residentes en España.
La decisión del órgano de justicia deportiva de la FIFLP se sustenta en el contenido del acta del partido Balos "B"-Achamán del campeonato de liga de categoría Liga Preferente Juvenil que fue arbitrado por el colegiado Mohamed Azirar Azzouzi.
Según se expresa en el acta, el colegiado fue objeto de comentarios xenófobos en dos momentos del partido.
El primero, y presumiblemente protagonizado por el padre del jugador, se produjo cuando se dirigía a la caseta. Una persona que fue identificado por el presidente del Achamán como el padre del jugador expulsado en el minuto 44 de partido, y al que ahora se ha sancionado, profirió insultos racistas al colegiado.
El segundo episodio se produce a los 10 minutos de la segunda parte, cuando los insultos se producen desde el exterior de la valla perimetral de la instalación futbolística, momento en el que actúan agentes de la Policía Local para proceder a su identificación, circunstancia que no se produce ya que huyen del lugar. Los presuntos protagonistas son el propio futbolista sancionado y su padre.
Según recoge el acta, en todo momento hubo colaboración del presidente del Achamán con el colegiado, hasta el punto de ofrecerse a escoltarlo hasta su domicilio.