Los canarios que huyeron de la inquietante India
25/04/2020

Los jugadores del Chennai acudirán a la FIFA para resolver un litigio de impago con el club, tras más de un mes esperando acontecimientos confinados en un hotel

B. Pérez


Los tres jugadores canarios que han estado confinados en India ya han regresado a las islas. Lo hicieron después de un viaje agotador que comenzó el martes 21, por carretera, y acabó el jueves por vía aérea tras paso por Bengaluru, Roma, Frankfurt y Barcelona. El grupo se separó para volar hasta las dos islas principales del Archipiélago.


Habían desestimado por inseguridad dos intentos anteriores propuestos por el Consulado de España, porque en Chennai esperaban acontecimientos sobre la Liga y sobre su club. Pero finalmente, tras el alojamiento en un hotel de la zona, desistieron y regresaron en compañía de su compañero Fito y la pareja de este.


En este grupo se encontraba el grancanario Roberto Eslava (32), que es jugador de reconocido paso por el fútbol canario. Las Palmas Atlético, Universidad, Marino, Granadina, San Fernando, ... además de Unionistas de Salamanca antes de la experiencia en India. También los tinerfeños Nauzet García y Sandro Rodríguez, este último ex jugador de Las Palmas.


El Chennai City tardó apenas unas horas en eliminar sus perfiles futbolísticos de la página web oficial del club. En realidad, la salida de los jugadores españoles viene acompañado por un trato desleal del club hindú, que dejó de cubrir parte de sus derechos económicos antes de anunciar, a comienzos de esta semana, la paralización de sus actividades deportivas. El caso acabará en manos de FIFA, según trascendió a través de Radio Canarias.

 

Los españoles, no sólo los deportistas isleños, que han salido de India han logrado escapar de un infierno de impredecibles pronósticos en el país que antes del coronavirus cifraba en 1300 millones de personas como censo oficial. El bloqueo interno, la versión local del estado de alarma, se activó el 25 de marzo paralizando en teoría la actividad económica del país. Finaliza el 3 de mayo.


Desde el otro lado del planeta, parece imposible hacer un cálculo de cuantas personas pueden estar contagiadas en una tierra tan desigual. E increíble el dato más reciente de 775 fallecidos oficiales, con un total de 24.506 contagios actualizados este sábado. Los números de India son tan misteriosos como cuestionables.


La BBC ya analizó cómo podría ser una organización de pandemia en un país "tan caótico" y con tantas necesidades. India es diferente en muchos aspectos y la llegada del COVID19 rescata esos elementos. The Indian Express ha relatado cómo se ha señalado a la comunidad islámica como responsables de esta causa sanitaria, que se ha llegado a considerar como una ‘coronayihad'. Hasta el punto de que, además de la diferencia de atenciones médicas a hombres y mujeres, también se aíslan a pacientes musulmanes de nativos hindúes.


Los conflictos entre religiosos se reactivan. Según Vatican News, a mediados de abril dos sacerdotes hindúes y su chofer fueron linchados hasta la muerte por 200 personas enfurecidas en el estado de Maharashtra. Al parecer habrían sido confundidos por traficantes de niños y la policía les habría bloqueado en el momento de acudir a un funeral.


El país no puede responder con una sanidad privada a la potencial demanda que una pandemia de estas características origina. Hoteles y dependencias privadas han sido confiscadas por las autoridades para reconvertirlas en hospital. La realidad en los suburbios, donde se hacinan millones de personas, es inquietante.


La policía y el ejército ha tenido abundante trabajo para tratar de ajustar un confinamiento imposible, con millones de personas fuera de sus casas en busca de alimentos. O huyendo hacia lugares alejados de las mega urbes.

 

En todos los lugares el golpe del coronavirus o sus efectos sociales no es igual. "Hay poblaciones completamente cerradas; nadie puede entrar o salir", ni noticias sobre ellas, desvelaba Moncho Ferrer días pasados, miembro del Programa de la Fundación Vicente Ferrer. "En la India no sólo se está luchando contra el virus, sino contra la pobreza y la ignorancia".


La única mejora visible de lo ocurrido es que la paralización de millones de vehículos en el país ha reducido la contaminación a como se conocía hace décadas atrás, refleja La Vanguardia.


Pero la realidad es que los jugadores canarios, así como el resto de españoles y ciudadanos europeos que han logrado salir del país, se han liberado de las siguientes incógnitas. Porque el gobierno de India ha abierto la mano desde este sábado y, aún con medidas de control, todas las tiendas se zafan del confinamiento. Anticipan un paso que no se atreven a hacer en países occidentales, con números de la pandemia acreditados por comités organizados para tal efecto.

 

Nili Perdomo, también jugador isleño en India, pidió a través de Tinta Amarilla a todos los jugadores que permanecieron en el país asiático su regreso. A partir de ahora, la pandemia la vivirán de otra manera a 9.500 kilómetros y desde otra perspectiva. Aunque los futbolistas del Chennai siempre manifestaron que en el lugar donde se encontraban no tuvieron dificultad en realizar una espera organizada y segura. Nada parecido a lo que se narra en el interior del país.

Fotos: Infobae

Comparte el artículo si te ha gustado
También te puede interesar