Manuel Borrego

Más de medio centenar de jugadores argentinos han defendido el escudo de la UD Las Palmas a lo largo de su historial. Muchos dejaron huellas importantes en el club, otros menos incidencia y unos pocos pasaron inadvertidos.

El San Lorenzo de Almagro, una de las entidades históricas del deporte de aquel país, tiene presencia en el club grancanario con jugadores que dejaron su sello personal. Y es curioso que, con la llegada reciente de Tomás Cardona, tres de esos futbolistas con etapas en el Ciclón han sido defensas centrales. Porque además de Tomi Cardona, también lo hicieron de amarillo Alejandro Omar Simionato y Diego Herner. El primero, llegado desde Lanús en 1996 con un paso anterior entre el 91 y 94 con el azulgrana de Buenos Aires. Y el segundo, con importante aportación cuando en 2011 vistió de amarillo.

Aunque el viaje de San Lorenzo a Gran Canaria más significado es el que realizó en 1985 Rubén Darío Insúa. El centrocampista era la estrella de aquel San Lorenzo dirigido por Bambino Vieira, con el atacante Rinaldi como su socio en el terreno de juego. Insúa llegó a la isla para reforzar a una plantilla recientemente ascendida a Primera División y curiosamente pudo cruzarse con Rinaldi, que fue firmado entonces por el Sporting de Gijón.

Por San Lorenzo también pasó Nico Frutos,delantero que vino a Gran Canaria muy joven en 2004, aunque con poca producción en la Liga. Sin embargo, luego hizo importante carrera internacional especialmente en Bélgica con el Anderlecht.

Ahora el turno es para Cardona, que no se ha desprendido a nivel administrativo de su pasado en San Lorenzo de Almagro. Aunque su presente es el amarillo de la UD Las Palmas, la plataforma desde donde quiere dar otro salto aún mayor en Europa.
Dijo en su presentación que ahora está en su sueño.