La lucha canaria en Canarias inicia un nuevo rumbo con la toma de posesión de Francisco Rivero Vega al frente de la Federación Regional. "Compartimos la impaciencia de los luchadores por retomar la actividad, pero también defendemos que este objetivo debe realizarse (en el tiempo de la amenaza de la COVID) de forma segura".
El acto de la toma de posesión de Francisco Rivero y la nueva rectora de la Federación de Lucha Canaria se celebró en el Edificio de Humanidades de la Universidad de Las Palmas de Gran Canaria, en la presencia de rrepresentantes de la vida pública, gobernantes del Ayuntamiento de Las Palmas de Gran Canaria , Cabildo Insular y Gobierno de Canarias, diputados y senadores nacionales y parlamentarios autonómicos. Junto a ellos, asistió al acto una amplia representación de la familia de la lucha canaria; el presidente de la Junta Electoral, Hilario Martín Francisco, y el secretario Rubens García; los presidentes y representantes de las federaciones insulares; María José González Medina (del Colectivo Mujeres en Lucha MEL); y la junta directiva del Tagoror, leyendas de la lucha canaria, como Vidal Martín Martín, Nino Morales "Pollo de Fasnia" y Salvador Sánchez "Borito", a quienes el auditorio -instado por el nuevo presidente Francisco Rivero- dedicó una larga y sentida ovación en el momento más emotivo de la reunión.
El acto fue presentado por José Alberto Hernández, redactor de TVE-Canarias, quien ponderó el hecho histórico de que Francisco Rivero es el primer presidente grancanario de la historia de la FLC en sus más de 30 años de historia.
Tras la toma de posesión de Francisco Rivero y su Junta de Gobierno, dirigido por los rectores de la Junta Electoral, intervino Aridany Romero, concejal de Deportes del Ayuntamiento de Las Palmas de Gran Canaria, quien destacó que "la lucha canaria está absolutamente asociada a la historia de la Ciudad" y que "el Gobierno municipal presidido por nuestro alcalde Augusto Hidalgo estuvo, está y estará absolutamente dispuesto a atender las demandas de la lucha canaria y los juegos y deportes tradicionales y autóctonos canarios".
El consejero de Deportes del Cabildo Insular de Gran Canaria, Norberto Francisco Castellano, enfatizó en "la necesidad de promover los ejemplares principios y valores de la lucha canaria", y, tras ofrecer la colaboración absoluta de la institución insular al nuevo mando de la FLC, expresó su satisfacción "porque un galdense asume un reto inmenso en un tiempo crucial de nuestro deporte". El rector de la Universidad de Las Palmas de Gran Canaria, Rafael Robaina, explicó que "el reto de nuestra institución es la tecnificación, y, por ello, en la Facultad de Ciencias de la Educación Física y el Deporte, tenemos una materia específica de lucha canaria".
El rector de la ULPGC destacó que "tenemos una misión social que debemos proyectar a nuestro Pueblo"; expresó su orgullo "por dar cobijo en nuestras instalaciones a los deportes autóctonos"; y concluyó su intervención con una elocuente exclamación: "¡Viva la lucha canaria!". El director general de Deportes del Gobierno de Canarias, Manolo López, disculpó la ausencia del presidente Ángel Víctor Torres y la consejera Manuela de Armas por "obvias razones de agenda" y agradeció "la gran labor realizada por el ex-presidente Juan Ramón Marcelino". Después de ofrecer un mensaje de "bienvenida" y un deseo de "suerte" a Francisco Rivero y su equipo, el director general de Deportes del Gobierno de Canarias explicó que "los departamentos de Educación y Sanidad trabajamos de forma transversal para que la lucha canaria recupere su espacio tras la inactividad obligada por la COVID" y adelantó que "todos debemos arrimar el hombro para que los luchadores vuelvan a los entrenamientos, y, en definitiva, a la nueva normalidad". "Lo importante", concluyó Manolo López, "es que gane la lucha canaria".
El nuevo presidente de la FLC, Francisco Rivero Vega, cerró el acto ofreciendo su agradecimiento a la Universidad de Las Palmas de Gran Canaria, a su rector Rafael Robaina y a su vicerrector Antonio Ramos Gordillo. Rivero interpretó la presencia de los ejercientes de la vida pública y política como "una esperanzadora señal de cariño a la lucha canaria y su significación social, cultural y deportiva". "Nuestro deporte autóctono", esgrimió Francisco Rivero, "está más necesitado que nunca de amparo y protección".
El nuevo presidente de la FLC expresó su gratitud a su antecesor, Juan Ramón Marcelino, "por su lealtad y cordialidad en el proceso de transferencia de poderes"; su compromiso "prioritario" con la lucha canaria femenina; y su reto en el objetivo de la consolidación de la internacionalización de nuestro deporte". "Espero y deseo", concluyó Francisco Rivero, "que pronto nos veamos en los terreros", culmina la nota federativa.