M.B.

Era algo que ya se había insinuado ante la Real Sociedad B, pero no tuvo la intención y continuidad de la primera parte. Este domingo volvió a repetirse en Cartagonova y llegó el fruto de la victoria. Las Palmas fue un equipo asfixiante, especialmente durante la primera mitad, y el Cartagena lo pagó con varios errores y un gol: el 0-2.

El equipo de García Pimienta se plantócon decisión en campo adversario, con abundantes efectivos y un criterio de búsqueda del esférico. A los 28 minutos fue Kirian el que captó un pase agobiado para entregarlo de inmediato en forma de asistencia. Jesé se percata de que el destino puede ser su compañero e inicia el movimiento de ataque antes de que el balón pase por las botas del tinerfeño.

Todo lo demás corresponde al delantero grancanario, con la virtud de emitir un disparo seco, potente y a media altura que no pudo salvar Marc Martínez.

No fue el único balón ganado en las proximidades del área del Cartagena aunque en la segunda parte esa tenaza bajó algunos enteros, quizá por el esfuerzo físico realizado y el empeño durante casi una hora. Luego, el equipo mostró otras virtudes en ataque como el contragolpe. Y también estuvo relacionado con al recuperación de balón.

Ahora la medicina del robo en campo contrario, la que ha padecido precisamente el equipo en diversos momentos de la anterior etapa técnica, ha pasado a campo contrario.