B. Pérez

Saúl Coco ha enlazadocinco partidos consecutivos en la defensa de la UD Las Palmas, en las últimas jornadas. Le ha tocado asociarse con Eric Curbelo y Raúl Navas.

El defensa internacional ecuato-guineano (23) considera que esta temporada fue clave la etapa en la que participó en la fase final de la Copa de África, compartiendo con sus compañeros Nzalang el mejor torneo de la historia.

Y, además, a nivel personal se produjo un cambio. “Mi mejor momento fue la Copa de África por lo que supuso: el verte rodeado de jugadores que he visto miles de veces por la tele y competir de tú a tú contra ellos. Fue una experiencia única. Sentía incredulidad incluso, era impactante para mí. Hice un buen torneo, crecimos en confianza con el paso de partidos. Fue clave para mi desarrollo, para el momento en que estoy ahora, porque me dio ritmo de competición y confianza”

“Ver que jugaba contra jugadores de élite me hizo ver que realmente no estaba tan lejos. Sé que tengo muchas cosas que mejorar, pero fue un impulso de moral y confianza” (…) “Cuando empieza el partido no miro a los rivales. Siempre voy fuerte sea quien sea”, expresó Coco a los medios oficiales de la UD Las Palmas.

No ha sido fácil llegar hasta aquí. “He vivido temporadas complicadas para mí. Mi primer año en Las Palmas fue muy duro. Cogí la malaria con la selección de Guinea (Ecuatorial), estuve en la UCI varias semanas, luego me recuperé, choque contra un muro en Tenerife, el del famoso vídeo … Fue una sucesión de catástrofes de las que afortunadamente he salido … Aprendí un montón”

“En las últimas semanas hemos hecho hincapié en la solidaridad del grupo, porque la energía es diferente. El día del Valladolid fue el banquillo todos a una o el otro día, en Ponferrada, cuando metimos el gol (de la victoria) los primeros que llegaron fueron los que estaban calentando y los suplentes, es reflejo de lo que es esta plantilla”, dijo al referirse a la plantilla de García Pimienta.

También recordó unas palabras en tono de consejo que le emitió Juan Carlos Valerón cuando ingresó en la Casa Amarilla: “Me gustaba mucho (Valerón) porque es una persona tranquila. Nos decía: No destaques en nada que no sea por tu fútbol. Disfruta, diviértete y no pienses en más allá. En ese tipo de jugadores hay que fijarse. Si llegaron tan lejos y lo respeta tanta gente es por algo”, concluyó.