B. Pérez

En plena remontada final de la UD Las Palmas, Alberto Moleiro firmó un gran gol frente al Real Oviedo y activó al equipo en una victoria decisiva.

El juvenil con dorsal 28 tuvo varios momentos importantes a lo largo de su primera temporada en el mundo profesional, pero sin duda esa volea para el 1-1 y en tan importante partido marca la campaña que ha firmado.

El crecimiento exponencial de Moleiro ha sido evidente. Con García Pimienta acabó como una pieza básica y una de las sociedades más productivas con el capitán Viera.

“Si no pasa nada raro”, como él mismo dijo, en agosto lucirá un número por debajo del 25.