B. Pérez

Si hay un futbolista que desde su arribo al primer equipo ha sobrevivido a todo tipo de prejuicios ese es Alex Suárez. No le ha importado ser suplente, tardar en debutar, salir de la convocatoria o ser relevado en el descanso. Álex siempre está preparado con el equipamiento de ayuda al equipo.

Son momentos delicados los que atraviesa la UD Las Palmas, los que más desde la llegada del nuevo entrenador. Lo son por la cercanía de un final de temporada en el que está en juego tantos meses de trabajo, por no decir años.

Lo de Suárez es para enmarcar una vez más. Díganle dónde debe actuar y lo hará con esa garra que se echa en falta en otros sectores. Se equivocará o acertará, pero innegable su voluntad, entrega y mano firme. Como se dice en los terreros de lucha, sin rehusar a la brega.

Si algo falla está Alex Suárez. Es una inspiración para la grada del Gran Canaria, camino del centenar de partidos en el primer equipo (92) ya instalado en la treintena, plena madurez de un futbolista.

Álex entró y salió en las últimas formaciones defensivas, donde se ha producido una rotación de piezas por lesiones o decisiones técnicas … salvo en el caso de Saúl Coco. Y por sanciones también.

En La Romareda harán falta muchos Álex Suárez y unos cuantos Jonathan Viera.