El aleatorio juego de los postes ha cambiado de dirección esta temporada. Ahora es la portería de la UD Las Palmas la que escupe balones a disparos rivales. La carpintería de Álvaro Valles ha funcionado nueve veces en doce jornadas, las dos últimas este viernes frente al Atlético de Madrid a disparos de Rodrigo Riquelme y Álvaro Morata. Y solo un balón, el del almeriense Ramazani, acabó en gol. Todo cuenta; si el pasado año Moleiro se ganó el premio al infortunio de los palos, ahora su equipo está saliendo beneficiado ... porque el fútbol es así.