B. Pérez
La piel del actual plantel del Villa de Santa Brígida, que recibe el viernes en Los Olivos a Las Palmas Atlético, está teñida por el amarillo de la cadena filial de la UD Las Palmas.
Una quincena de los futbolistas que dirige el ex amarillo internacional Ángel López pasaron por el club de la capital tanto en sus equipos de formación como en la primera plantilla (casos de los hermanos David y Héctor Figueroa). Incluso el portero titular, Jonay Quintana, tiene ese nexo porque fue jugador de equipo vinculado a la UD Las Palmas, cuando el Universidad (donde actuaba como juvenil) estaba unido por convenio a la entidad de Pío XII.
Jugadores como Manu Dimas, Carlos Leto, Héctor Marrero, Ale Pipo, Alvarito, Ale Gil, Cristian Barrios hasta el juvenil Jorge Puga tienen esa presencia con el escudo filial de la UD.
Y en el banquillo, también, a las órdenes del mencionado López; entre otros asistentes, Víctor Rivero, que combina su cargo en Los Olivos con el de técnico del i+i de la UD Las Palmas.
El nexo entre ambos clubes también corre en sentido opuesto: Alex Suárez, que desde el Villa regresó a la UD Las Palmas, fue el único grancanario titular frente al Atlético en la última jornada de Primera.