B. Pérez

En varias ocasiones durante las últimas semanas, el presidente de la UD Las Palmas, el entrenador y el director deportivo han comentado que no existe intención inicial del club en realizar movimiento alguno en el siempre imprevisible mercado invernal.

De momento, a falta de pocas horas para el cierre de las nuevas inscripciones o salidas (22.59 del jueves 1 de febrero, hora canaria) la situación es así. Otros tres clubes de Primera están en similares circunstancias (Girona, Osasuna y Real Madrid), porque tampoco han visto en su perímetro esas expectativas de mejora.

Ahora regresa de inmediato Saúl Coco tras su segunda participación en la CAF y se podría considerar como un refuerzo para renovar la plantilla defensiva del equipo, que ha incorporado una pieza más desde el filial con las aportaciones del dorsal 31 ocupado por Juanma Herzog. Los movimientos en el segundo equipo, reforzando también esa demarcación con una nueva pieza (Fran Acosta, del C) podría interpretarse como una señal.

Si es un asunto relacionado con las facultades competitivas del equipo o por clasificación, la UD Las Palmas no tiene necesidad de ir a contrarreloj en esas horas finales del mercado invernal. Aunque sabe bien Luis Helguera que los teléfonos no van a cesar hasta minutos antes de cruzar la frontera hacia el 2 de febrero.

Muchos técnicos viven con esa incertidumbre. García Pimienta podría hipotéticamente perder sueño más por la puerta de embarque que la de aterrizaje. Si se tienen en cuenta rumores publicados sobre intereses de jugadores en forma de la UD Las Palmas para resolver problemas ajenos … esa sería la mayor incertidumbre.

Pero hay datos que hablan de que no hay en el invierno de 2023-24 ánimos de compra de otras temporadas. Lo recuerda hace unas horas Sport, como dato ilustrativo: De los 950 millones de euros en compras de jugadores del verano, los clubes de fútbol en Arabia Saudí han pasado a invertir 23 millones antes del reciente cierre de su ciclo de incorporaciones. Y esa cifra genera un efecto dominó en el balompié continental.

Así que caen las horas, se aproxima el final y, de momento, están todos los que son y son todos los que están. Con permiso del factor sorpresa.