B. Pérez

En el transcurso de la pasada semana, antes del viaje a Granada, Sandro Ramírez (28) reconoció que la ausencia de goles con su firma no le crea una obsesión. “El año pasado aparecí en el momento importante” recordó desinflando cualquier indicio de ansiedad.

Esa aparición a la que hace referencia se traduce en los 4 goles en 3 jornadas determinantes en el ejercicio del ascenso, justo antes de la última jornada frente al Alavés donde todo acabó como había empezado. Y precisamente Aarón Escandell, el ahora portero de la UD Las Palmas, fue el último guardameta al que batió Sandro. Ocurrió con un doblete en el 1-4 del 20 de mayo de 2023, cuando Aarón formaba parte del Efesé Cartagena.

El siguiente gol de Sandro aguarda, pero cada día queda menos. Se aproxima, sin duda. Aunque cuando se habla del ariete grancanario hay que tener en cuenta que dentro de sus cualidades futbolísticas no es Sandro precisamente un devorador del área. En 169 partidos de Primera con distintos equipos, Sandro suma 27 tantos anotados.

Su mejor año realizador lo firmó Sandro como jugador del Málaga. Anotó 13 tantos con el equipo de La Rosaleda. Lo que quizá puede generar ese deseo en él es haber alcanzado la jornada 23 del vigente campeonato sin haber firmado el gol soñado con la camiseta del que club donde se formó.

Lo que no se puede cuestionar a Sandro Ramírez es esa búsqueda. Con 24 disparos (uno menos que Kirian) es el segundo futbolista de la UD Las Palmas que más veces ha probado, tras Munir (30). Suma tres asistencias, aunque no se puede obviar que en más la mitad de las 23 jornadas no participó en los planes de García Pimienta por problemas físicos: 10 partidos disputados, 862 minutos cubiertos hasta el momento en 2023-24.

Ese primer gol de Sandro está por llegar, sin la carga de tener esa responsabilidad absoluta en el equipo. Se lo hacen saber sus compañeros: 13 amarillos ya han anotado en el campeonato, con un reparto que encabeza Kirian (5). Se hace raro no ver en el grupo a Sandro.