Finalizó el partido y García Pimienta no pudo contener sus lágrimas. No sabemos si en su etapa azulgrana vivió tantas emociones como en cada una de las tres campañas de amarillo. Pero ahí están las imágenes. Y, además, "he sido yo mismo. No he sido un actor", dijo. El futuro dirá si amarillos y él volverán a emocionarse juntos.