El dato más llamativo de la última jornada fue el solitario disparo que pudo desplegar la UD Las Palmas en el partido del Metropolitano. Este registro tiene más que ver con el potencial defensivo del Atlético de Madrid que la inacción de su oponente amarillo.

Y a la vez rescata algunos hechos que merece la pena comparar con el resto de ‘competidores’ directos de la clasificación. El conjunto que ahora dirige Diego Martínez -antes Luis Carrión- está en cifras de lanzamientos a portería que no son desdeñables, con un total de 134 chuts -49 de ellos entre los tres postes-. El promedio está por encima de 11 disparos por partido, siendo el dato de la última jornada una ‘extraña avis’ en el comportamiento grupal. Por eso obedece más a los méritos rojiblancos.

Inevitablemente hay otros hechos que merece la ocasión comprobar para conocer la dificultad que está representando a distintos conjuntos para no solo terminar jugadas de ataque sino ponerse por delante en el marcador.

Entre esos equipos que están en el último tercio de la clasificación, la UD Las Palmas es el que ha logrado disfrutar de más tiempo de una ventaja en sus marcadores. En total, 187 minutos acumulados en cuatro partidos: Desde el 1-0 al Real Madrid hasta el empate de Vinicius, desde el 1-0 al Betis hasta el 1-1 antes del descanso de Lo Celso, desde el 1-2 al Valencia obra de Fabio Silva y con el solitario gol de Alex Muñoz al Girona.

Ese tiempo en ventaja representa el 17,3% del total de juego acumulado en 12 jornadas. Como dato curioso es lo ocurrido frente al Real Madrid, siendo el rival que más tiempo estuvo en desventaja ante la UD con un total de 64 minutos entre gol y gol.

Pero no es la Unión Deportiva el equipo con peores referencias y ello implica que otros conjuntos tienen también idénticos problemas. Valencia ha estado al frente en el marcador 150 minutos, Leganés un total de 149, Valladolid sigue con 91, Espanyol con 89 y Getafe con 87. Y la inercia indica que estos conjuntos están en ‘otra liga’ donde el gol es preciosa joya de difícil tenencia.

Hay mucho margen de mejora en el equipo grancanario. Pero no todo ha caído en saco roto.