Iñigo Pérez, entrenador del Rayo Vallecano, contempla la visita de la UD Las Palmas como una posibilidad de dar “un golpe encima de la mesa” ante un rival directo. Los 16 puntos que ya tiene el conjunto de Madrid en su ‘tesorería’ no le hacen perder la perspectiva real de los acontecimientos que son inmediatos en su calendario.

Sirva esta primera observación para subrayar que todo está muy justo al cubrirse este fin de semana el primer tercio de la competición. Y que el conjunto de Diego Martínez está a tiempo de todo si es capaz de volver a encarrilar su trayectoria como estaba haciendo antes de cruzarse con el Atlético de Madrid.

El último saber de la Liga no es definitivo, como tampoco las dos jornadas precedentes. Hay señales de mejora en la producción de la UD Las Palmas. Y la visita al Rayo es, sin duda, mejor ocasión para ponerlas en práctica y volver a sumar estando ya tan cerca la frontera de la zona de permanencia.

Los protagonistas del equipo amarillo se han esforzado en hacer ver que no ha dejado daño la derrota frente a una de las potencias del campeonato. Aquel resultado respondió más a lo realizado por un rival que, como quien no quiere la cosa, fue capaz días después de darle un disgusto al mismísimo PSG.

Diego Martínez insiste en crear el caldo del optimismo que respalde el esfuerzo de sus jugadores. Parece obvio que la respuesta del Rayo, a nivel de contención, no debe tener la misma proporción que el último rival. Y que Las Palmas puede haber llevado al factor de corrección aspecto del juego que fueron deficitarios en el Metropolitano.

Martínez dispondrá de un once titular en el que puede contar con el recuperado Jasper Cillessen. Y también al bloque de jugadores, con posibles novedades, que habían salido airoso de los dos encuentros ganados por Las Palmas en el vigente campeonato.

El de Vallecas es un partido al que acudir sin remordimientos, porque la UD debe recuperar el camino y para pelear por unos puntos que pueden liberarla de las celdas de castigo. Y eso sí que es en sí mismo un gran aliciente antes del tercer parón del campeonato.