El legado de Manolo Pazos: los secretos de la mar

El maestro de campeones, cuyo nombre lo llevará el Centro Canario de Tecnificación de Vela, recibe un emotivo homenaje póstumo en la capital grancanaria

La esposa de Manolo Pazos y su hijo recibe un ramo de flores en el homenaje realizado al maestro de campeones de la vela canaria (C. Torres)

Manuel Borrego

Los secretos de la mar no caen en el olvido. La lectura del rizo de las olas, los atajos para los barquitos de competición, la caricia del alisio, … De todo ello se empaparon los discípulos de Manolo Pazos Díaz (1949-2021), el recordado maestro de campeones que falleció a comienzos de agosto en Las Palmas de Gran Canaria.

Este viernes, Pazos recibió un humilde y emotivo recuerdo en la base náutica de la Federación de Vela. Allí, entre familiares, amigos, compañeros, alumnos y con el director general de deportes del Gobierno de Canarias como testigo institucional se envió un mensaje al cielo cargado de cariño y admiración. El Centro Canario de Tecnificación de la Vela llevará su nombre a partir de este día y en él los profesores que recibieron su testigo seguirán contando a los aprendices de podio todo aquello que les enseñó en vida durante décadas el gallego canarión Pazos.

“Sus enseñanzas las reciben las generaciones pasadas, presentes y futuras de nuestra vela”, dijo a la reducida audiencia el presidente de la Federación, Rafael Bonilla. Relató algunos momentos vividos con el homenajeado y recordó que la función del instructor “era siempre estar en el agua para ayudar a los chavales”. Algunos de ellos alcanzaron la gloria olímpica.

Joaquín Blanco también habló de Pazos no ya como el arquitecto de grandes deportistas, como los hay en su saga familiar, sino como colaborador profesional de la Federación y de sus dirigentes. “Este homenaje se lo merece Manolo por sus más de 50 años de entrega. Es un día triste” por su ausencia, pero “también de alegría. Porque así lo podremos recordar eternamente”.

Manolo López, en representación del deporte de Canarias, aprovechó el momento para enviar un mensaje de solidaridad al pueblo palmero por su sufrimiento en esta dura semana. Y dedicó hermosas palabras a Manolo Pazos, elogiando la iniciativa de hacer eterna su memoria en el Centro de Tecnificación Deportiva que ya lleva su nombre. Lo hizo con un sabor agrio, por “cuanto supone de despedida a un profesional del deporte lúcido, generoso, empático, alegre y entregado como pocos”.

Y recordó la dulzura del acto “por el convencimiento de la importancia de su legado y del sello indudable que dejó en generaciones de jóvenes de nuestra tierra y fuera de ella, a quienes inculcó valores de superación, sacrificio y amor a nuestra naturaleza oceánica” (…) “Se prolonga su memoria en cuantos nos precedan en la práctica deportiva y de la vela. Quienes tuvimos la fortuna de conocerlo, no podríamos olvidarlo nunca”, concluyó López.

El hijo de Pazos, José, fue portavoz emocionado de la familia. Apenas pudo agradecer el gesto de los organizadores del homenaje sin dejar la mencionar la fotografía que decoraba el acto con Manolo Pazos pilotando una zodiac en la bahía … Regatistas como Patricia Guerra, Domingo Manrique, Juan Curbelo, Gustavo del Castillo o José María Ponce, también presentes en el pantalán, contemplarían en aquella imagen todo lo que se trató de explicar en tan entrañable encuentro. Esos secretos que Pazos les entregó toca compartirlos.